RESEÑA LITERARIA

Cuentagotas,

después del Diluvio Universal

Primera edición 2020

Edición de la autora 114 pp.

Miguel Ayala

    Tan pronto dirigí la mirada hacia el libro, este me hizo un guiño. De entrada, la autora presenta un par de escritos que captaron mi atención y esto provocó que mis sentidos se volcaran hacia el texto. El título evoca la historia antigua y, por añadidura, al contador de historias. Valiéndose de esta combinación, María Verónica Gibbs, le ofrece a los lectores el contexto de la obra. Bien podríamos inferir que las condiciones impuestas por la lluvia causó que los animales necesitarán la asistencia de la contadora de cuentos. Esta, según va adelantando el viaje se convierte en pieza clave para reordenar, nominar y narrar la cotidianidad.

    La publicación está dividida en cuatro partes que corresponden con el número de tramos que componen la travesía. Estos son: Por mar, Por aire, Por tierra y Por río. A lo largo de cada tramo la narradora nos entretiene con historias relacionadas al entorno. Sobre los relatos podemos adelantar que son de corte lúdico. La autora logra mantener equilibrio entre el tono juguetón del texto y su contenido, logrando una obra de gran calidad. La presentación del trabajo está excelentemente lograda. Las ilustraciones cumplen cabalmente su cometido. De igual manera se puede decir que el trabajo del arte se llevó a cabo con esmero.

    La combinación de elementos que conforman “Cuentagotas, después del Diluvio Universal” dan como resultado una experiencia refrescante. Cuando terminé el libro se me dibujo una sonrisa similar a las que me acompañaron mientras devoraba el texto. Además, debo añadir que si bien el trabajo apela al lector joven, también cuenta con los elementos necesarios para satisfacer las expectativas del público en general. Para redondear, podemos añadir que “Cuentagotas, después del Diluvio Universal” es un gran acierto de María Verónica Gibbs tanto por su contenido como por su presentación. Definitivamente puedo asegurar que la publicación es una de las mejores que he leído en buen tiempo.